viernes, 16 de octubre de 2015

Verónica y Angela Reyes

Verónica y el hombre bello


Al amparo de Pablo Méndez y tras la minuciosa presentación de Óscar Barrero, Ángela Reyes se dejó llevar por la historia de su nueva novela “Verónica y el hombre bello”; empezó a leer despacio y alegremente, incluso después de recordar que era la primera vez que presentaba un libro sin su mayor crítico y  admirador, su marido Juan Ruiz de Torres.


La escritora andaluza Ángela Reyes


            Los párrafos que leyó parecían anécdotas muy reflexionadas, vividas, diría yo, por Ángela Reyes,  que a través de la voz de la protagonista del libro, Verónica, esa niña de diez años, lúcida, inteligente, sagaz y alegre cuenta el interesante viaje que emprende junto a trece hombres, una mujer de reputación dudosa y un perro.

Público asistente a la presentación de Verónica y el hombre bello, de Ángela Reyes

            Relata en su peculiar cuaderno de bitácora el diario de la gran aventura vital que hace uniéndose al círculo de los seguidores de su maestro, reconociendo en él  a la persona que cambiaría la historia del mundo para siempre.  Las atentas reflexiones de la niña, nos describen de manera informal, con una prosa siempre en la búsqueda de la claridad, la actitud del maestro, de la terrenal  María, madre de Jesús, vigilante y en ocasiones gruñona por la honesta bondad de su hijo y las amistades de este y su dudosa reputación,  la extrañeza ante esa pequeña que afirma saber leer y escribir con una naturalidad pasmosa, cosa impensable en una mujer en los albores del cristianismo.


Oscar Barrero, Ángela Reyes y Pablo Méndez, en El Centro Riojano de Madrid.

            La sala estaba llena y la compañía de escritores y poetas conocidos también fue notable, por allí estaban:   Paco Castañón, Antonio Daganzo, Fernando López Guisado, Rosa María Estremera, José García Caneiro, Luis Arrillaga, Paco Caro y Enrique Gracia Trinidad entre muchos otros atentos al nuevo trabajo de Ángela Reyes.


Verónica y el hombre bello, de Ángela Reyes. Ed. Nostrum.



            La lectura de pasajes dando voz a la mirada infantil  y divertidamente osada, conmovió y arrancó risas al nutrido público  que asistió al entrañable acto, los cariñosos aplausos de muchos compañeros y amigos de la escritora, arroparon  su tierna lectura.



Mercedes Ramírez